En Valencia no hay nada que ver.

Tristemente eso es lo que se decía en Valencia hace mas 20 años. Si quieres saber que puedes ver en Valencia, tanto en la Ciutat como en la Comunitat, pásate por aquí.

Gracias a Dios llegó Rita, Santa Rita, Rita, lo que se da no se quita y Valencia se convirtió en lo que es hoy en día: Centro de atracción social, económico, cultural y deportivo mundial.

Hoy en día para ver Valencia se necesitan días; inmensos cruceros repletos de turistas llegan todas las semanas al puerto de Valencia, tenemos Campeonato mundial de motociclismo, proximamente de F1, viene el Papa Benedicto XVI, Mundiales de Atletismo, de Ciclismo en pista cubierta, el Oceanográfico, el Hemisféric, L'Umbracle... Eso si, nos falta algo muy importante, EL AGUA.

Pero todo lo ha conseguido Rita y el Gobierno del PP, el AGUA no se ha conseguido gracias al PSPV-PSOE y otros de la misma calaña.

No se moleste: aquí no hay mucho que ver.

La anécdota que circula como famosa entre los valencianos dice que a la entrada de Valencia por la carretera de Barcelona había un gran cartel que decía “Valencia, ciudad europea hermanada con Maguncia (RFA), Bolonia (Italia), Magdeburgo (RDA), Craiova (Rumania)” y que junto a ese cartel había otro, menor, que decía: “Valencia: visita en 20 minutos”.

No ha sido posible localizar esa fotografía en el Archivo de LAS PROVINCIAS lo que abre la puerta a que, si existe y algún lector la tiene, nos la pueda remitir. Pero sí que existe esta imagen, tomada el 30 de julio de 1987, en el curso de los grandes atascos de Operación Salida. El cartel, situado en la entrada de Valencia por Barcelona, decía: “Valencia 1 km. Centro histórico visita 3 horas”, una información realmente desalentadora que invitaba a pasar de largo de una ciudad que tenía muy pocos encantos que ofrecer.

Como se ha dicho estos días, durante la campaña electoral, la ciudad de Valencia tenía en los ochenta una débil vocación turística, si es que tenía alguna. Lo sangrante es que en ese verano de 1987, como en los dos siguientes, la ciudad todavía seguía siendo el “Semáforo de Europa”. No había ronda de circunvalación, toda la circulación entre norte y sur tenía que pasar por la avenida de Cataluña y seguir por el atascado Camino de Tránsitos. Valencia era tristemente famosa por sus pésimas infraestructuras, era una tortura atravesarla y esta era una razón más para que el turismo huyera de la ciudad.

Hasta octubre de 1989 no se puso en servicio el “By-pass”, la actual ronda de circunvalación, ya colapsada. Habían pasado más de 25 años desde que el ministro Fernández de la Mora anunciase que el concepto de autovía Barcelona-Gibraltar debíamos situarlo en una ronda exterior que no haría necesaria la penetración por la ciudad.

Leido en Las Provincias Digital

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Saludos Anti ZP

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